17 noviembre 2009 - El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, y la consejera de Empleo y Asuntos Sociales del Gobierno vasco, Gemma Zabaleta, han anunciado  en Bilbao que la Agencia Europea para la Seguridad y la Salud en el Trabajo tendrá una sede definitiva en la capital vizcaína. Esta agencia tiene su sede en Bilbao desde 1996 en un inmueble alquilado, una situación considerada inadecuada por la Comisión Europea y el Gobierno central y que según fuentes de la consejería, comprometía la permanencia en Bilbao de la agencia.

Los ejecutivos central y autonómico aportarán a partes iguales 200.000 euros para sufragar unos locales propios para la agencia. Según han señalado la consejera vasca de Empleo y Asuntos Sociales, Gemma Zabaleta, se acaba así con una etapa de "indefinición e inseguridad" con respecto a su ubicación. Zabaleta ha precisado que las conversaciones para fijar el emplazamiento están "muy avanzadas" y que tan sólo falta por conocer la decisión de los responsables del la agencia sobre el emplaziento elegido.

Zabaleta ha añadido que los Gobiernos central y vasco correrán con los gastos de alquiler mientras se decide la ubicación definitiva. El anuncio se ha realizado durante la Cumbre Europea del Trabajos Saludables, organizada por la propia agencia y a la que ha acudido tambiénel ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, y su homólogo sueco, SvenOtto Littorin. Corbacho ha recordado que tanto la Comisión como el Parlamento europeos habían manifestado su descontento por las "condiciones inadecuadas" en las que se encontraba la agencia en Bilbao y ha destacado la "nueva sensibidad" del Gobierno Vasco para resolver la situación.

En el transcurso de la cumbre, Corbacho ha destacado la necesidad de abordar la seguridad y salud laborales desde un ámbito "tripartito" en el que participen empresarios, sindicatos y Administración, a la vez que ha hecho hincapié en que el "reto" tanto de la UE como del Gobierno español es avanzar en la "cultura de la prevención" y en la formación en este ámbito. Según los datos facilitados por el ministro, los accidentes laborales en España hasta septiembre alcanzaron una cifra ligeramente inferior a los 4.200, un 23,5% menos que en el mismo periodo del año pasado. Corbacho ha achacado esta mejoría a la labor de concienciación, a los mecanismos de control de la Administración (las inspecciones de trabajo en España se han incrementado un 30%), pero también a la menos actividad económica consecuencia de la crisis.

Littorin, por su parte, ha subrayado las muertes por accidentes laborales en la UE ascienden a 167.000 anualmente y también ha destacado que las pérdidas asociadas a este tipo de incidencias en el viejo continente se cifran en un 6% del PIB.