SEGURIDAD VIAL

El complemento para la moto que querrás llevar al conocer sus múltiples beneficios

Fuente: www.abc.es/motor

Todavía hay pocos motoristas que utilizan chaleco airbag en España, de hecho, de los 3 millones de motos que hay en nuestro país, tan solo 50.000 conductores hacen uso de este complemento, según la Dirección General de Tráfico (DGT). Esta tendencia coincide con datos aportados desde el mundo del seguro, siendo paradigmático que solo un 0,4% de los siniestros registrados en 2019 en AMV, líder en la comercialización de seguros de moto online, estuvieran relacionados con daños en cascos y chalecos airbag.

Teniendo en cuenta que el año pasado aumentaron las ventas en el sector de las «dos ruedas», así como el número de accidentes en este tipo de vehículos, resulta especialmente problemático que todavía no haya muchos motoristas que se animen a utilizarlo. Por este motivo, la DGT ha incluido en su Plan de Medidas Especiales para la Seguridad Vial de Motocicletas y Ciclomotores 2019-2020 la recomendación del uso del chaleco airbag.

En esta línea, las compañías de seguros cada vez se preocupan más de ofrecer coberturas que cubran los complementos de los motoristas. Según destaca Cédric Parnaudeau, director general de AMV para España y Argentina: «El uso de este equipamiento es fundamental para minimizar la gravedad de las caídas en caso de accidente y sabemos que cada vez más motoristas le dan mucha importancia al cuidado de sus complementos. Por este motivo, en todas las modalidades de seguros de AMV se incluye la garantía de casco y chaleco airbag. La valoración de los daños en el equipamiento se realiza de forma independiente a los de la moto y para ello el cliente sólo tiene que aportar el ticket o la factura de compra».

Aunque el precio del chaleco airbag puede ser uno de los factores que influyen en que sus cifras de uso todavía no sean muy altas, cada vez más expertos defienden su efectividad. Desde la DGT ponen énfasis en la importancia de utilizar este complemento, así como de llevar guantes homologados. Aunque el uso de estos últimos todavía no es obligatorio, todo apunta a que no tardará mucho en serlo, tal y como anunciaron el verano pasado. Todas las medidas son pocas cuando se trata de reducir en la medida de lo posible la siniestralidad sobre las dos ruedas, así como la gravedad de las caídas.