22 de marzo, Día Mundial del Agua, con el agua al cuello
Hoy, 22 de marzo se conmemora el Día Mundial del Agua para recordar la relevancia de este líquido esencial. Esta celebración tiene por objetivo concienciar acerca de la crisis mundial del agua y la necesidad de buscar medidas para abordarla de manera que alcancemos el Objetivo de Desarrollo Sostenible: Agua y saneamiento (ODS6) para todos antes de 2030.
Quizás esta frase que es de película, y que a veces usamos de forma figurada, a día de hoy nos gustaría que fuese realidad, en su sentido más literal. España sufre uno de los procesos de sequía mayores de los últimos años, la más reciente la registramos en el 2017 cuando en el mes de septiembre fue el más seco del siglo XXI con solo 15 l/m², un 33% de la media.
Este fenómeno natural cíclico se registra en todos los países bañados por el Mediterráneo, tanto en su vertiente europea como en el norte de África. Es un problema habitual y previsible que necesita de planificación y previsión para la prevención de futuras sequías y problemas en el abastecimiento de agua.
No obstante, no resulta menos preocupante cuando la situación se repite o se ve acentuada por el cambio climático.
Cuando se habla de sequía no solo hay que mirar al cielo, sino también a la tierra. A esta sequía meteorológica, se le suma una sequía hidrológica; los embalses están muy por debajo de su capacidad, actualmente al 44% de su capacidad y bajando.
Haciendo caso al refranero español "solo nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena", por ello pequeñas medidas de concienciación y de readaptación de nuestra forma de vivir, pueden ayudar a sumar gotas de agua.
Utilizar ahorradores de agua en todos los grifos y duchas. Un aireador nos permite reducir el consumo de agua hasta un 50%.
No utilizar los inodoros como papelera y asegurarnos de que no goteen, lo cual permite ahorrar agua.
Evitar las fugas o pérdida de agua de los canales de distribución. Aunque parezca increíble entre el 10 y el 15% del agua se pierde por el mal estado de las tuberías. Para detectarlo debemos estar atentos a la factura del agua: pasar de 33m3 en un periodo de facturación a 125m3, puede significar que tenemos una fuga de agua no detectada.
Y además otras acciones complementarias pasan por sembrar árboles, racionalizar el consumo de agua, reutilizar elementos, reciclar y reducir la cantidad de desechos, ahorrar energía, entre otras.
¿Cómo entendemos y concienciamos sobre el cuidado del agua en Fraternidad-Muprespa?
Tenemos implantado un Sistema de Gestión Ambiental, lo que implica la adopción de pautas de actuación para el control de consumo de recursos naturales, que permiten monitorizar posibles fugas, pérdidas o mala gestión de este recurso. Además hay un trabajo de concienciación mediante la implantación de objetivos de reducción, noticias, correos y registro de incidentes y accidentes ambientales.
¿Qué acciones concretas llevamos a cabo?
En Fraternidad-Muprespa hemos establecido medidas de concienciación donde queda plasmado nuestro compromiso por el medioambiente:
- Un Manual de Buenas prácticas Ambientales.
- La Implementación de dispositivos de ahorro de agua como difusores en los grifos, y sistemas de doble descarga.
- Sistema de reutilización de aguas, provenientes de los lavabos y las duchas de nuestro Hospital Habana.