Fraternidad-Muprespa desgrana las claves del emprendimiento senior de la mano de Natalia Fdez. Laviada
“Descubrir todo sobre el emprendimiento senior” ha sido el título de la jornada organizada este miércoles en Madrid por 50PRO&GBO y que contó con la participación de Fraternidad-Muprespa, representada por Natalia Fernández Laviada, subdirectora General de Prevención, Calidad y Comunicación. La cita reunió a expertos de diferentes ámbitos para llevar a los emprendedores profesionales senior a ser motores de su propio proyecto y dotarles de herramientas con las que afrontar los retos de una nueva etapa en la vida profesional.
Con una ponencia titulada “El síndrome del desempleado”, Fdez. Laviada comenzó exponiendo diversos datos centrados en la edad y la vida laboral. España es el segundo país por longevidad de su población, solo por detrás de Japón. La esperanza de vida de las mujeres es de 85,7 años y 80,4 la de los hombres. Casi una de cada cinco personas tiene más de 65 años y la mitad de la población activa, es decir, ocho millones de personas, tiene una edad de entre 55 y 70 años. “Trabajar después de los 63 años es infrecuente y después de los 66 muy excepcional”.
Si la longevidad no para de crecer y la población está cada vez más envejecida, son necesarias reformas que desincentiven la expulsión del mercado trabajo de los mayores de 55 aseguró Fdez. Laviada desterrando el prejuicio del Edadismo, cada vez más frecuente.
Dada la necesidad real en muchas entidades de gestionar equipos de edades diferentes, la subdirectora de la Mutua explicó la importancia de abordar la “diversidad generacional para una mejor convivencia empresarial de modo que se eviten conflictos derivados de los distintos puntos de vista en lo personal y lo laboral. La solución pasa por el desarrollo de una estrategia para gestionar equipos multigeneracionales” explicó para dar paso a continuación a describir dichas medidas.
Crear espacios de encuentro que incentiven el conocimiento personal, promover programas de mentorización, tanto en su modelo clásico (el senior tutela al joven) como en el inverso (el joven guía al mayor en la adquisición de nuevas competencias, sobre todo tecnológicas) y planificar la Prevención de Riesgos Laborales atendiendo a este colectivo cada vez más amplio son algunas de las ideas que resumió en su exposición.
“Empresarialmente abordar estas cuestiones es positivo para las organizaciones dado que mejora la reputación de la entidad, atrae y conserva el talento, incrementa la motivación y por tanto reduce las bajas laborales y el absentismo, y aumenta la innovación y la creatividad, además de que ética y legalmente la discriminación es un grave error” aseguró Natalia Fdez. Laviada a modo de conclusión.