
Nutrida representación de Fraternidad-Muprespa en el Congreso Preveras
Fraternidad-Muprespa ha participado los días 13 y 14 de octubre en el 12º Congreso Internacional y 16º Nacional de Ergonomía y Psicosociología celebrado en Gijón, una cita que contó con una nutrida representación de la Mutua. Tras una inauguración institucional a cargo de Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, comenzaron los diferentes debates organizados en mesas redondas.
El primero con participación de Fraternidad-Muprespa tuvo lugar el jueves en la mesa redonda “¿Precariedad, diversidad y felicidad?, no todo vale”, moderada por Mar Morales, directora del departamento de Prevención y Desarrollo de la Cultura de la Salud de la Mutua. El objetivo que perseguía la mesa era la necesidad de ser rigurosos con las actuaciones sobre bienestar cuyo fin sea mejorar la salud de la empresa. “No podemos poner el foco en el trabajador, desviando la atención de lo que debería ser prioritario” aseguró Morales, para incidir en que hace falta que existan “medidas preventivas orientadas a introducir cambios en la organización, en la carga de trabajo y en su capacidad de causar estrés, ansiedad y depresión”.

Ya por la tarde María Eugenia Colotto, consultora de prevención, tomó parte en la mesa redonda “Ergonomía, crisis y NT: ¿nuevo paradigma?”. Colotto se centró en los trastornos musculoesqueléticos y expuso que la Delegación de Barcelona de la Mutua ha identificado que el 44% de los accidentes reportados en el registro de siniestralidad entre enero y junio de 2021 se debieron a sobreesfuerzos. “Esto ratifica el trabajo que queda por hacer en las empresas para disminuir o mitigar estos sobreesfuerzos y la contingencia profesional en general”, aseguró Colotto, que subrayó la importancia que Fraternidad-Muprespa concede al trabajo mano a mano con sus empresas mutualistas para promover una ergonomía 'participativa’ como respuesta al sobresfuerzo.
La primera jornada concluyó con la mesa “Riesgos psicosociales y empleo con enfoque de género”, moderada por Ana Fdez. Castro, directora de la Delegación de Fraternidad-Muprespa en Gijón. Fdez. Castro se centró en las diferencias en las condiciones laborales de las mujeres. “Las tareas feminizadas, la temporalidad y las actividades monótonas y repetitivas suponen que la exposición a los riesgos psicosociales no afecte igual a hombres y mujeres”, aseguró. “Muchos riesgos están asociados a ocupaciones altamente feminizadas y otros son propios de las mujeres, como el acoso sexual o la discriminación por razón de sexo”. Por ello, concluyó “es necesario lograr que las empresas se comprometan con la aplicación de la perspectiva de género”.
El viernes el congreso retomó su actividad con la mesa redonda “Píldoras en ergonomía y psicosociología para la seguridad y salud en trabajo”, que contó con la presencia de Natalia Fdez. Laviada. La subdirectora general de Prevención, Calidad y Comunicación de Fraternidad-Muprespa compartió su visión sobre el liderazgo saludable. “Ahora es vital un liderazgo menos coercitivo, más influyente y cercano, capaz de gestionar la diversidad en todas sus variantes, de liderar a grupos diversos, en contexto presencial y virtual, de ser un e-lider. Los líderes deben ser valientes, ejemplares, auténticos, éticos, promotores e impulsores del cambio que necesita la sociedad en general y nuestras empresas en particular”, destacó, para pasar después a describir a los ‘antilíderes’, que han perdido la habilidad de influenciar el comportamiento de otras hacia un objetivo.
Iván Fernández, consultor de Prevención de la Mutua, fue el encargado de clausurar la presencia de Fraternidad-Muprespa en este Congreso. Lo hizo participando en la mesa “Factor humano y trabajo real”, donde analizó los conceptos de error y acierto humano, un análisis que “ayuda a establecer vías de futuro para poder fomentar el acierto y minimizar el error” aseguró. Fernández también incidió en que “dentro del factor humano siempre resaltamos el error, pero no tenemos en consideración el acierto, especialmente porque no genera daños”. “A pesar de que insistimos en analizar el error y a él le atribuimos un porcentaje muy elevado de los accidentes laborales, poco hacemos a nivel de persona”, concluyó.